Recomendaciones y control del medio ambiente del paciente alérgico

Lea las siguientes recomendaciones cuidadosamente, para aplicarlas en su casa poco a poco. Recuerde, el primer punto para iniciar la limpieza será la recamara del paciente. Cada alérgeno (sustancia que causa alergia ) tiene sus características y por consecuencia medidas especificas para reducir el contacto con el paciente.

El nexo que emparenta nutrición y enfermedades respiratorias, es cada vez más firme, como han expuesto varios estudios a lo largo de 2007 que defienden que la dieta mediterránea podría prevenirlas

La prevalencia de asma, que en España afecta al 7 por ciento de la población, aumenta en los países industrializados sin que se conozcan del todo las causas (ver mapa), aunque se apuntan varios factores, desde la teoría de la higiene, según la cual crecer en ambientes asépticos en los primeros años de vida impide la correcta maduración del sistema inmunológico, hasta el cambio climático, que alteraría los ciclos de polinización y exacerbaría las crisis.

Pero la población de los países de la cuenca mediterránea, en los que tradicionalmente se han consumido más frutas, verduras y pescado que en los anglosajones, se encontraría más protegida del asma, de acuerdo con dos estudios coordinados por Leda Chatzi, de la Universidad de Creta (Grecia). En el primero de ellos, publicado en abril en Thorax, los investigadores quisieron averiguar por qué los niños cretenses presentaban una prevalencia de asma bronquial y rinitis alérgica más baja de lo normal. Tras analizar la dieta de setecientos menores hallaron un efecto protector en las frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, nueces y aceite de oliva.

Mom's prenatal diet may affect her infant's allergies Annals allergy feb 2010

Mothers who eat more green and yellow vegetables, citrus fruit, and vegetables and fruits high in beta carotene during pregnancy may lessen their risk of having a baby with eczema, according to a study in Allergy. Scientists at Fukuoka University, Japan, evaluated the vegetable and fruit intake during pregnancy of 763 women, whose average age was 30. The women reported their personal and medical histories at about week 17 of their pregnancies and when their babies were 16 to 24 months old. The scientists then evaluated early-age eczema or allergic wheeze in the women's babies. After allowing for other factors, the women who ate greater amounts of green and yellow vegetables, citrus fruits, or beta carotene while pregnant were less apt to have an infant with eczema. Higher vitamin E intake was associated with a reduced likelihood of a wheezing infant.

El nexo que emparenta nutrición y enfermedades respiratorias, es cada vez más firme. Se argumenta que la dieta mediterránea podría ser un factor en la prevención.

El asma aumenta en los países industrializados sin que se conozcan las causas. Varios factores parecen influir. Una de ellas es la "exagerada" higiene. La teoría de la Higiene nos enseña que crecer en ambientes asépticos en los primeros años de vida impiden la correcta maduración del sistema inmunológico por la falta de contacto con microbios. Otro factor es el cambio climático, que alteraría los ciclos de polinización y exacerbaría las crisis alérgica.

Los habitantes de los países mediterráneos, donde se consume más frutas, verduras y pescado que en los anglosajones, se encuentran parcialmente protegidos del asma, de acuerdo con estudios realizados por Leda Chatzi. Los investigadores estudiaron por qué los niños cretenses presentaban menos asma y rinitis alérgicas. Tras analizar la dieta de los menores hallaron un efecto protector en las frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, nueces y aceite de oliva.

En gestantes

El segundo estudio, publicado meses más tarde en Pediatric Allergy and Immunology y realizado en 460 niños españoles, identificó las hortalizas de fruto y el pescado como los alimentos más beneficiosos para la salud respiratoria. Un consumo diario de al menos 40 gramos de alimentos como el tomate, la berenjena, el pepino, las judías verdes o el calabacín protegían especialmente del asma alérgico, mientras que la ingesta diaria de 60 gramos de pescado reducía todas las alerg ias infantiles. Este efecto se observó además en el futuro hijo cuando era la madre la que consumía altas cantidades de pescado durante la gestación.

También, en el Congreso de la Sociedad Torácica Americana, celebrado en mayo en San Francisco, se presentó una investigación en 1.212 menores desarrollada por la Universidad de Aberdeen, en el Reino Unido, que mostró la influencia de la alimentación de la gestante en la salud respiratoria del niño. A los 5 años de edad, la prevalencia de asma era menor entre aquéllos cuyas madres habían consumido más cantidad de manzanas en el embarazo. El consumo de pescado una o más veces a la semana redujo a su vez la prevalencia de eczema. Pero esta vez no se encontró este efecto protector en otros alimentos como hortalizas, zumo de cítricos o kiwi, productos integrales y productos lácteos bajos en grasa.

Éstos y otros trabajos motivaron que la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) publicara un comunicado en diciembre en el que defendía los beneficios de la dieta mediterránea no sólo frente al asma y la rinitis, sino también frente a la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (ver noticia inferior).

El neumólogo del hospital madrileño Gregorio Marañón Javier de Miguel defiende que las vitaminas, los antioxidantes y los omega 3 (nutrientes abundantes en la dieta mediterránea) 'ayudan a mantener la salud pulmonar'. Además, destaca el poder antiinflamatorio del magnesio y sus efectos sobre la dilatación bronquial. 'Por este motivo', señala, 'es importante incluir en la alimentación cotidiana alimentos como cereales, nueces, vegetales de hoja y productos lácteos. También el pescado, que constituye una buena fuente de magnesio y ácidos grasos omega 3, que tienen propiedades antiinflamatorias'.

Controversia

Aun así, Ascensión Marcos, profesora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y Luis Manuel Entrenas, neumólogo del Hospital Reina Sofía, de Córdoba, y miembro de la Separ, exponen a CF que sobre esta asociación existe todavía 'bastante controversia', y que la evidencia disponible hasta el momento no permite extraer conclusiones generales. 'Lo que está muy claro es que la dieta mediterránea es mucho más beneficiosa qu e otras en las que no se consumen frutas, verduras, aceite de oliva y pescado', expone Marcos. 'En este sentido, bien llevada a cabo, es una dieta inmunomoduladora, reduce el riesgo de infecciones, y tiene propiedades antiinflamatorias, lo que es interesante para hacer frente a alergias, asma, y procesos inflamatorios de todo tipo, como los respiratorios'.

Alimentos reconocios por su efecto benéfico sobre el sistema respiratorio

  • Naranjas, tomates y manzanas: ricos en antioxidantes, protegen frente al asma, rinitis e infecciones.
  • Uvas rojas: su piel contiene un alto grado de resveratrol, potente polifenol con acción antiinflamatoria.
  • Nueces: fuente de vitamina E, protege frente al daño celular provocado por los radicales libres. Tienen un alto grado de magnesio, que protege frente al asma y fortalece la estructura pulmonar.
  • Pescado: tiene un alto contenido en magnesio, que favorece la dilatación bronquial, y es buena fuente de ácidos grasos omega 3, que tiene propiedades antiinflamatorias.
  • Huevo, hígado y lácteos: gracias a su contenido en vitamina A y carotenos, también presente en algunas frutas y verduras, favorecen la vitalidad de las mucosas.

Los ácaros son bichitos microscópicos que se nutren de la piel humana. Se encuentran en colchones almohadas y artículos con superficie peluda. Se multiplican en un ambiente húmedo y caliente, se mueren cuando la humedad se reduce de un 40 a un 50%  y con temperaturas altas mayores  a 70 grados centígrados. Lo que causa la alergia es la inhalación de las partículas de materia fecal de los ácaros. Por eso tenemos los 10 pasos más importantes a seguir.

  1. Mantener el piso limpio sin alfombra o tapetes.
  2. Tener  closets cerrados para bolsas, zapatos juguetes, libros. Un juguetero o librero abiertos acumulan polvo, al igual que tener libros o revistas debajo de la cama.
  3. Los muñecos de peluche no son recomendable.
  4. Envolver colchones con  fundas especiales, estas se pueden encontrar en Allergy Care, 52770804
  5. Aspirar cuando el paciente no se encuentre, limpiar con trapos húmedos. Las aspiradoras con filtros especiales para partículas muy pequeñas (HEPA, por sus siglas en ingles), son las recomendables. Para conocer este producto contacte al Sr. Juan Carlos Nieto al 04455.4888.2426, o descargue el siguiente archivo.
  6. Cortinas lisas de preferencia lavables, en caso de persianas de laminillas hay que limpiarlas una vez a la semana con un trapo húmedo.
  7. No animales o aves en la recamara, de preferencia no dentro de la casa.
  8. No fumar dentro de la casa. Ventilar bien la recamara por las mañanas.
  9. Lavar ropa de cama con agua a una temperatura alta para matar a los ácaros. Sacudir fuera de la recamara el polvo de cobijas o cortinas y ponerlas al sol una vez por semana.
  10. No tener muebles con recubrimientos peludos.

Siguiendo estos sencillos  pero importantes pasos tu alergia se verá disminuida.

¿Qué provoca la dermatitis atópica?

La causa de la dermatitis atópica es desconocida, sin embargo se sabe que factores como la sequedad intensa, determinados productos irritantes o la sudación excesiva pueden aumentar el picor y empeorar la dermatitis.

¿Se puede curar la dermatitis atópica?

No existe cura para la dermatitis atópica, pero en la mayoría de los casos es controlable, desapareciendo por sí sola durante largos períodos de tiempo.

Unos sencillos consejos le ayudarán a mantener la piel de su hijo en perfectas condiciones:

El baño

  • El baño ayuda a eliminar costras, sustancias irritantes y bacterias. Si se usan los productos adecuados, hidrata la piel y favorece la eficacia de los medicamentos que se aplican después.
  • Sin embargo, el baño excesivo, si no se sigue de la aplicación de un producto hidratante, puede resecar la piel. Utilice agua templada y jabones ácidos, de avena, de aceite, o incluso solo agua sin jabón sobre las zonas afectadas.
  • Seque al niño con suavidad y sin frotar con la toalla.
  • Aplíquele después del baño una crema hidratante que sea grasa y sin perfume.
  • Puede repetir la aplicación de la crema varias veces al día para mantener la piel suave (la piel del niño con dermatitis atópica se reseca con mucha facilidad).

La ropa

  • Lave la ropa con jabones que no irriten y aclárela muy bien, sin lejías ni suavizantes.
  • Use preferiblemente ropa de algodón. El contacto con lana y fibras sintéticas puede aumentar el picor.
  • Evite también la ropa muy ajustada y no le abrigue demasiado porque si suda puede empeorar.

Los picores

  • Evite en lo posible que el niño se rasque las zonas de piel afectadas. Su pediatra puede recomendarle un medicamento para aliviarle el picor.
  • El rascado con las uñas provoca pequeñas heridas en la piel que se infectan con facilidad. Para evitarlo mantenga las uñas de su hijo cortas y limpias.
  • A veces el rascado se produce durante la noche, mientras duerme, sin que usted se dé cuenta y puede
    ser necesario el uso de guantes de algodón para dormir.

La temperatura

  • Si es posible, evite ambientes extremos en temperatura

La humedad

  • El ambiente frío y muy seco le secará más la piel.
  • En un ambiente muy húmedo y caluroso sudará más y puede empeorar.

El sol

La mayoría de los niños con dermatitis atópica mejoran con la exposición al sol. Pero mucho cuidado porque deberá estar siempre que se exponga al sol, en playa, piscina, montaña, etc., con un factor de protección mayor de 30, renovándolo cada 2 horas, y evitando exposiciones solares intensas.

Para que tenga menos recaídas, cuide la piel de su hijo todos los días del año.

Si a pesar de todos estos cuidados su hijo presenta brotes de dermatitis su pediatra puede indicarle el tratamiento más adecuado:

  • Las cremas de corticoides son seguras si se utilizan durante cortos períodos de tiempo y sólo sobre la piel afectada.
  • Las cremas sin corticoides reducen los brotes de la dermatitis

Es un trastorno metabólico que conduce a una excesiva acumulación de energía en forma de grasa corporal en relación con el valor esperado según el sexo, talla y edad.

El criterio más exacto para el diagnóstico de obesidad es la determinación del porcentaje de grasa que contiene el organismo. Para ello se pueden utilizar diversas técnicas de medición que estiman el contenido de grasa del organismo, como son: la antropometría, la pletismografía por desplazamiento de aire, la absorciometría dual de rayos X y la impedanciometría, entre otras. En la práctica clínica actual, el índice más utilizado para el diagnóstico de obesidad es el índice de masa corporal (IMC).

En niños la forma habitual para definir y clasificar la obesidad es la comparación del peso del niño con el peso de una población de niños normales. Cada vez se usa más el IMC, pero en el caso de los niños se ha de tener en cuenta la edad y el sexo, ya que el IMC “normal” cambia con la edad de forma diferente en niños y niñas.

Es la acumulación excesiva de grasa corporal, especialmente en el tejido adiposo, y que se puede percibir por el aumento del peso corporal cuando alcanza 20% a más del peso ideal según la edad, la talla, y sexo de la persona en cuestión.

Para calcular el peso ideal de un niño entre 2 y 5 años de edad, aunque de forma apenas aproximada, hay que multiplicar la edad en años por dos más ocho.

Ejemplo: para saber cuánto debe pesar, en media, un niño de cinco años, multiplica la edad (5) por 2 y suma 8. Es decir, 5×2+8=18kg. Este método no es exacto. Se trata de una ilustración. Lo cierto es consultar y considerar lo que diga el pediatra del niño.

Causas

Según los especialistas del tema, los cambios alimentares y las nuevas formas de vida son los principales desencadenantes en el aumento de la obesidad. Es decir, los criterios alimentares y la correría cotidiana de los padres son algunos de los factores que contribuyen a que los niños presenten sobrepeso.

Sedentarismo:

Aparte del consumo de alimentos con alto contenido en grasas y azúcares, el sedentarismo de muchos niños les hace más obesos. El practicar una actividad física es esencial a su crecimiento y a su salud. El estilo de vida que llevan los niños también ha cambiado mucho.

La mayoría de las actividades que realizan se concentran en torno a la televisión, al ordenador y a los videojuegos. Muchas familias, por la falta de tiempo o por comodidad, acaban dejando a los niños delante de la televisión toda una tarde, en lugar de llevarlos al parque o a cualquier otra actividad que les favorezcan más.

Los juegos al aire libre, las excursiones, los deportes, etc., son cada día sustituidos por actividades sedentarias. Según las últimas encuestas, los niños españoles pasan una media de 2 horas y media diarias viendo la televisión y media hora adicional jugando a los videojuegos o conectados a la Red.

Otros factores:

Existen, además del mal hábito alimentario y la falta de actividad física, que son los que encabezan los motivos por los que la sociedad tenga sobrepeso, otros factores que determinan la obesidad infantil. Puede haber influencias sociales, fisiológicas, metabólicas y genéticas. Un niño con padres obesos, por ejemplo, estará predispuesto a ser obeso también. Sea por una cuestión social, de mal hábito alimentario, o por genética. También se puede presentar obesidad en caso de que el niño sufra algún trastorno psicológico.

Consecuencias

Los malos hábitos adquiridos durante la infancia pueden llevar al niño a sufrir consecuencias preocupantes, principalmente para su salud. El riesgo de desarrollar trastornos durante la adolescencia es un ejemplo claro de lo que puede suceder si el niño obeso no recibe el tratamiento y la atención adecuada a su alimentación y forma de vida.

Males que la obesidad puede generar:

  • Problemas con los huesos y articulaciones.
  • Dificultades para desarrollar algún deporte u otro ejercicio físico debido a la dificultad para respirar y al cansancio.
  • Alteraciones en el sueño.
  • Madurez prematura. Las niñas obesas pueden entrar antes en la pubertad, tener ciclos menstruales irregulares, etc.
  • Hipertensión, colesterol, y enfermedades cardiovasculares.
  • Disturbios hepáticos
  • Desánimo, cansancio, depresión, decaimiento.
  • Baja autoestima, aislamiento social, discriminación.
  • Trastornos que derivan en bulimia y anorexia nerviosas
  • Problemas cutáneos.
  • Ocurrencia de diabetes.

Según los expertos, la obesidad cuando se manifiesta en la infancia y persiste en la adolescencia, y no se trata a tiempo, probablemente se arrastrará hasta la edad adulta.

Recomendaciones

  1. Ir caminando a la escuela o bajar una parada antes.
  2. Fomenta juegos que no sean sedentarios.
  3. Que no se pase mucho rato delante de la televisión ni de la computadora.
  4. Prepárale comidas variadas y equilibradas.
  5. Evita los restaurantes de comida rápida, y si concurres come una sola porción de comida (o sea una sola hamburguesa).
  6. Evita las bebidas con gas (refrescos).
  7. Llevar una alimentación adecuada

pirámide de la alimentación

Pirámide de la alimentación.

 

Prevención
La prevención de la obesidad infantil, la responsabilidad recae en los padres, quienes tienen la obligación de observar los siguientes aspectos:

  • No utilizar la comida como premio o castigo. No es la mejor manera de inculcar buenos hábitos alimenticios.
  • Fomentar la actividad física en los niños. Los niños necesitan ejercicio, estar en contacto con la naturaleza y despejarse de la vida en las ciudades, la tecnología y el ocio pasivo.
  • Respetar la estructura alimenticia diaria. Se ha demostrado que la prevalencia de obesidad es mayor en aquellos niños que toman un desayuno escaso o lo omiten.
  • Una buena combinación de dieta equilibrada, actividad física regular e interacción social, es la estrategia más viable para hacer frente a este problema que afecta a nuestros niños, sin discriminación, y así asegurarles una vida más larga y sana.

Aspectos Psicológicos

Los niños obesos tienen una pobre imagen de sí mismos y expresan sensaciones de inferioridad y rechazo. Por lo tanto, suelen presentar dificultades para hacer amigos. La discriminación por parte de los adultos o de los compañeros desencadena en ellos actitudes antisociales, que les conducen al aislamiento, depresión e inactividad, y frecuentemente producen aumento en la ingestión de alimentos, lo que a su vez agrava o al menos perpetúa la obesidad. En la adolescencia el concepto de sí mismo es de tal importancia que cualquier característica física que les diferencie del resto de sus compañeros tiene el potencial de convertirse en un problema más grave, en concreto disminuyendo su autoestima. Es también un gran problema encontrar vestimenta para los niños obesos, ya que es difícil que encuentren ropas de moda adecuadas para su talla. Además, estos niños presentan frecuentemente alteraciones del comportamiento, síntomas de depresión y ansiedad.

También es más frecuente que las personas obesas coman compulsivamente, y que tengan un largo historial de desórdenes alimentarios que se caracterizan por los atracones y las variaciones de peso. Por ejemplo, la influencia de factores Psicológicos aún permanece incierta, mientras que el paciente obeso ha sido etiquetado como comedor compulsivo, también encontramos a muchas personas no obesas que también lo son.

La patología psicológica se encuentra ligada a esta enfermedad, solo en un número pequeño de casos, entre estos el "síndrome del comedor nocturno" (anorexia por la mañana, gula por la tarde e insomnio), han incluido en este pequeño grupo a aquellos que han sido obesos desde su infancia, en este caso, más que un factor de acusa psicológica, el sentido común lo llamaría una consecuencia psicológica.

Tratamiento Psicológico

Muchos trastornos del apetito encubren disfunciones familiares o problemas de autoestima y sociabilidad, los que pueden influir en las conductas con respecto a ingesta y actividad física. "Un mal manejo de un trastorno psicológico puede dificultar un cambio hacia conductas saludables, contribuyendo al fracaso del tratamiento", enfatiza. Final mente se explica que todos estos aspectos han sido considerados para implementar el protocolo operacional del Programa de Tratamiento de la Obesidad Infantil y Juvenil del INTA, tiene como objetivos principales, en primer lugar, realizar un enfoque y un manejo integral de la obesidad del niño y del adolescente que contribuya un éxito a largo plazo, tanto de la prevención como del tratamiento de la obesidad.

En segundo lugar, modificar conductas con respecto a hábitos de ingesta y de actividad física, promoviendo hábitos nutricionales y estilos de vida saludables en el paciente y en su familia, y finalmente, conseguir la normalización de los trastornos metabólicos que conducen a enfermedades crónicas del adulto en los pacientes afectados. El Programa está formado por un equipo multiprofesional que incluye pediatra, endocrinólogo, nutricionista, psicólogo, enfermera y técnicos profesionales de apoyo (gastrónomo).

Dentro del programa se incluyen talleres nutricionales teóricos y prácticos para enseñar a preparar una dieta saludable y talleres psicológicos para preparar al niño y a su familia para el definitivo cambio de hábitos, dice finalmente la especialista.